La certificación y la afirmación del poder se manifiesta en los documentos reales desde el siglo XII a través del empleo de los sellos rodados en tinta y de sellos pendientes normalmente realizados normalmente en plomo o cera. A ellos se dedica una parte específica en MOMECA.

El caso de Alfonso X es excepcional por conocerse un número reducido de cartas en las que este último elemento se realza con oro: tres documentos dirigidos a Sevilla en 1253 y 1283, uno a Toledo en 1259, uno a El Puerto de Santa María en 1281, dos al rey de Inglaterra, ambos datados en 1254, y el anuncio de la reconciliación con el Infante Sancho en 1284. De  cuatro de ellos conservamos los originales, en concreto, los tres emitidos para Sevilla y el Privilegio rodado de Alfonso X traspasando sus derechos sobre Gascuña al príncipe Eduardo I de Inglaterra (The National Archives, E30/1108), el único que mantiene el sello pendiente.

Se había descrito el molde de un sello en el que el rey aparece entronado portando una cruz en su mano derecha y un orbe en la izquierda, con leyendas ALFONSVS DEI GRACIA ROMANORVM REX SEMPER AUGVSTVS, sin embargo, carecemos a la fecha de datos para suponer dorado el original.

El ejemplar que nos ha llegado mide 51 mm. En una cara se presenta un castillo en cuya puerta aparece el rey con cetro y en la otra un león rampante hacia la izquierda. Las leyendas en ambas caras son idénticas: S ILLVSTRIS REGIS CASTELLE ET LEGIONIS. La descripción responde al tipo MOMECA S06.2 de Alfonso X, del que conocemos ejemplares en cera y plomo en documentos emitidos entre 1254 y 1279.

La numeración de este ejemplar en este catálogo es MOMECA S06.4.

Para saber más:

Juan Carlos Galende Díaz, Antonio José López Gutiérrez, Nicolás Ávila Seoane, Sellos áureos de Alfonso X, Murcia, 2024.

Imágenes:

The National Archives, E 30/1108