Una de las tipologías más interesantes de la moneda medieval guarda relación con las representaciones de santos. La Edad Media es un tiempo en el que la religión ocupa un espacio importante en la vida de los hombres y es natural que muchos de los testimonios artísticos que nos han llegado tenga una importante carga religiosa.

Durante el siglo XII en el espacio leonés y castellanos como en Francia o Alemania, antes de que la carga simbólica alusiva a los monarcas acabara por imponerse en las monedas, encontramos ejemplos de referencias religiosas (báculos, mitras, elementos alusivos a libros de la Biblia como en Génesis o el Apocalipsis, etc.). De entre ellas, vamos a fijarnos en las representaciones de santos, como en las siguientes monedas francesas.

El Apóstol Santiago tiene una importancia perfectamente conocida en la Edad Media. Se han escrito muy buenas páginas en relación con la circulación de moneda que articula el Camino de Santiago. También en torno a los donativos que dejaron algunos peregrinos medievales en las reliquias que conserva la catedral compostelana. En este caso, nos fijamos en las representaciones del santo. Tanto el busto frontal como la escena de la traslatio están acuñadas en torno a 1165 y se fabricaron para pagar al Maestro Mateo en las labores constructivas de la catedral compostelana.

Para saber más:

Antonio Roma Valdés, Erea Castro Alfonso, Pablo Rueda Rodríguez-Vila y Raúl Sánchez Rincón, Las monedas leonesas y castellanas del siglo XII, Madrid, 2019